martes, 31 de julio de 2012

Cannonball Adderley with Milt Jackson: Things are getting better

Fotografía de la portada por
Charles Stewart
Things are getting better es un All Star Sesión grabado el 28 de octubre de 1958 en NYC para el sello Riverside, la primera edición de vinilo contó con 7 temas, que después en la edición en cd se ampliaron a 9. El propio Cannonball Adderley (1928-1975) compone tres de los temas, el vibrafonista Milt Jackson también aporta un tema "Blues Oriental", los otros temas son de Budd Johnson, Dizzy Gillespie y Cole Porter, la duración total es corta, pero muy íntensa, son 36 formidables minutos, cronológicamente está situado entre "Portrait of Cannonball (1958) y "Cannonball and Coltrane" (1959).
Los créditos son inmejorables, un quinteto de lujo, cada uno maestro en su instrumento y todos dirigidos por Adderley que además toca el saxo alto, Milt Jackson con el vibráfono, sereno, inteligente, calculador y muy conservador, pero con ese aire de Bluesmen que le acompaña en todas sus grabaciones, Winton Kelly al piano, el acompañante favorito de Dinah Washsington, que en esta grabación juega un papel muy activo,  Percy Heath al bajo como siempre con una gran sensibilidad y acostumbrado a llevarle el ritmo a Jackson y Art Blakey en la batería convirtiéndose por méritos propios en el líder de la sección rítmica. El disco aparece bajo el liderazgo de Cannonball Adderley, pero cualquiera de los músicos de este quinteto tiene peso específico para ser líder de la formación.
Julián "Cannonball" Adderley es considerado ante todo un improvisador formidable. Tanto el saxofonista de Tampa como Milt Jackson son líderes natos y por tanto individualistas, los dos también coinciden en estar posicionados en una corriente moderna dentro de lo tradicional, con unas fuertes raíces ancladas en el blues y en el jazz, en ambos casos también  poseen un gran sentido del ritmo como patrón básico lo que juntos les otorga mucho juego. La conjunción no podía ser mejor, una interesante yuxtaposición entre el lado interpretativo y de improvisación de Adderley y entre el lado más cerebral de Milt Jackson, así aunque provenientes de distintos lados de la escena musical los dos músicos son considerados unos extraordinarios intérpretes de Blues y éste es el lazo que une a estos dos mitos musicales en esta memorable grabación.
Es digno escuchar el sonido limpio, nítido, calculado del saxo alto "King super 20 silversonic" acompañado y arropado por ese quinteto de lujo que en esta grabación dieron lo mejor de sí, dejándonos un disco para la historia.

De 5 > 10, mi valoración es: 8


un vídeo con el tema "things are getting better" que da nombre al álbum:



domingo, 29 de julio de 2012

Wes Montgomery: The incredible Jazz Guitar

Portada del disco
The Incredible Jazz Guitar, es un disco que no debe faltar en la colección o en la memoria musical de cualquier buen aficionado al jazz, ya que es un disco que marca un hito dentro de la carrera musical del guitarrista y de la guitarra como instrumento, con este álbum la guitarra obtuvo un lugar destacado en el jazz, Montgomery (1925-1968) fue capaz con su instrumento de generar una dimensión distinta, mística, entrañable, músico e instrumento formaban un todo. "El pulgar de oro"  llamado así por la técnica que empleaba al tocar la guitarra con su pulgar, de manera suave, acogedora; otra técnica distintiva fue el empleo de sus solos basados en octavas, con estas dos técnicas y un entusiasmo único el guitarrista de Indianapolis, supo organizar ritmos, armonías y texturas musicales que siempre suenan a "relajado", independientemente del tempo utilizado.
El álbum se graba en NYC, para el sello Riverside, los días 26 (temas 1,2,4,5, y 6) y 28 ( temas 3,7 y 8) de enero de 1960, el disco lo conforman un total de 8 temas de los que 4 son de composición propia, tiene una duración de 44:04 minutos y cronológicamente se sitúa entre "The Wes Montgomery trío (1959) y "Moving´ Along" (1960) . Con The incredible Jazz Guitar consigue un disco bello, etéreo, acogedor, entrañable, suave, cálido, mágico, uno de los discos más hermosos de guitarra de jazz que tuvo una influencia notable en guitarristas de generaciones posteriores y es que se trata de una grabación insuperable, de las más influyentes, imitadas y recordadas. Logra un equilibrio casi perfecto entre técnica  e inspiración, mostrando al mundo de la música su talento como compositor y su versatilidad e imaginación como músico, además supone su consagración definitiva por varios motivos: porque logra un numero elevado de ventas, por la buena critica que obtuvo, por su reconocimiento como guitarrista y sucesor natural del gran Charlie Christian, a partir de aquí empieza a recibir premios como "músico del año" en Billboard, artista revelación en el Metronome Guitar, etc.
Wes Montgomery con su insustituible guitarra Gibson (L5CES) se convierte en la estrella de la década de los 60¨s, un mito vivo de la guitarra de jazz, con su extraño sonido anómalo causo estragos  y es que supo sacar de su Gibson un sonido suave, dulce, limpio, cálido, acogedor, mágico, preciso, cargado de lirismo que aún hoy, 50 años después conmueve su escucha.
Acompañan a Montgomery Percy Heath (The Modern Jazz Quartet) que está soberbio con su contrabajo, su hermano Albert Heath en la batería y Tommy Flanagan en el piano, quien con su sobria elegancia, resulta la combinación perfecta para el guitarrista, aquí Flanagan nos demuestra su habilidad para deslizarse detrás de Montgomery sin problemas, casi su sola presencia asegura el éxito de la grabación.
El disco se encuentra incluido en el libro "los 100 mejores discos de Jazz" y es muy recomendado para neófitos que quieran introducirse en el mundo del jazz.

De 5 > 10, mi valoración es: 9


Te dejo un vídeo con el tema nº 4 "Four on Six":





sábado, 21 de julio de 2012

Ben Webster & Harry "sweet" Edison: "Ben and Sweets"

El sonido que Webster logra sacar de su saxo es una de las "maravillas" del jazz, un sonido recio, áspero a veces, duro, compacto, con cuerpo y a la vez susurrante, aterciopelado, cálido, sigiloso lo que le  hace acreedor de ser uno de los mejores intérpretes de baladas en el mundo del jazz, si a esto le sumamos la trompeta de Harry "sweet" Edison con sordina, acompasada al saxo, al piano, oscilando ambos sobre la base rítmica y cargando de swing la escena, tenemos como resultado este disco "Ben and Sweets", un álbum redondo, una pieza maestra dentro de la música de jazz. El saxo proveniente de la cuerda de saxos de Duke Ellington y el trompetista proveniente a su vez de la cuerda de trompetas de Count Basie, llevaban tiempo queriendo grabar juntos y estos dos gigantes se juntan en esta sesión de grabación que tiene lugar los días 6 y 7 de junio de 1962 en NYC, grabando seis maravillosos temas para la Columbia Récords con una duración de unos 40 minutos maravillosos, sensuales, de jazz del bueno, cargados de swing, dando cada uno lo mejor de sí.
Webster y Edison están acompañados nada más y nada menos que por Hank Jones al piano y que en esta grabación se convierte en una pieza clave, en el contrabajo está George Duvivier y en la batería Clarence Johnston, en definitiva un quinteto de lujo que forman un equipo perfecto donde la química se percibe en cada nota, logrando gran parte de las cualidades esenciales del jazz. El trompetista de Ohio brilla en las composiciones medias y los blues, mientras que el saxofonista de Kansas consigue seguramente alguna de sus baladas más "románticas". Los dos músicos disponen en la grabación de momentos de gloria, estupendos solos para Webster y alternativas maravillosas de Edison quien ejecuta maravillosamente la sordina consiguiendo ese sonido suave, sedoso que te pone los pelos de punta. A destacar el tema "My Romance" una balada donde ambos sacan de su interior lo mejor que tienen y nos lo ofrecen para nuestro deleite, donde Webster está soberbio y "Kitty" donde Edison suena realmente maravilloso, quizá los dos mejores temas del álbum, aunque el resto son de una excelente factura.
Lo puedes escuchar una y otra vez, que no te cansas, cuando algo es sencillo, elegante y está hecho con el corazón se percibe, se transmite y "Ben and Sweets" es un legado dejado para los amantes del buen jazz.

De 5 > 10, mi valoración es: 10


Te dejo un vídeo de "Ben and Sweets"


lunes, 16 de julio de 2012

Joe Lovano: Tenor Legacy

Joe Lovano
Tenor Legacy es un álbum de estudio donde prima el saxo tenor de Lovano (1952) interactuando con otro saxo tenor el de Joshua Redman, dos estilos, dos sonidos distintos, un mismo proyecto, un mismo tipo de instrumento, ambos convierten la grabación en una de esas sesiones donde hay un derroche de virtuosismo, buen gusto y un mismo concepto artístico. El sexteto lo completa un elenco de músicos de gran talla como son: Mulgrew Miller sensacional en el piano, Christian McBride espectacular con el bajo, Lewis Nash en la batería y Don Alías en la percusión, todos arropan musicalmente a Lovano y éste los lidera de forma magistral como un titan de los metales.
El disco lo produce el mismo Lovano, se graba el 18 de junio de 1993, para la Blue Note Récords, es posterior a " Universal Language" de 1992 y precede a "Quartets: Live at the village Vanguard" de 1994, tiene una duración total de 66 minutos y cuenta con diez magníficos temas, cinco compuestos por el saxofonista de Cleveland,  dos estándares y otros tres temas recuperados del olvido y que no son muy conocidos, hay que tener en cuenta que Lovano es muy músico exquisito a la hora de seleccionar los temas y muy completo, que le gusta moverse en distintas corrientes, sin dejarse encasillar, motivo por el que presta especial cuidado en interpretar con un profundo respeto los temas que selecciona y los estilos de la música que toca.
El disco en su lanzamiento en 1994 tuvo una excepcional acogida tanto por parte de la crítica especializada como de sus seguidores y admiradores y es que sin duda, estamos ante uno de los grandes saxofonistas de jazz contemporáneo y uno de los "grandes" de todos los tiempos. Su creatividad, su sonido potente, limpio, ágil, rocoso a veces, capaz de enganchar al oyente, con su estilo vigoroso y firme en los tempos rápidos y relajado, sensual y líricos en los tempos lentos, lo que hace de Joe Lovano un músico de una categoría extraordinaria. En definitiva estamos ante un disco excepcional, de esos que podemos decir sin complejo alguno que es "Jazz del bueno".


De 5 > 10, mi valoración es: 9


Te dejo un vídeo del disco Tenor Legacy:



sábado, 14 de julio de 2012

Brad Mehldau: Ode

Brad Mehldau
Gran trabajo del pianista que durante los últimos quince años más alegrías nos ha reportado a los amantes de la buena música y que más ha contribuido a renovar la estética del jazz. Ode es un disco para escuchar con atención porque cada nota está llena de sugerencias, de vida. Jazz moderno, contemporáneo, muy bueno que nos interpela desde la primera nota. Mehldau nos sorprende muy gratamente con melodías cargadas de talento y nos abruma con su originalidad que parece no tener fin y que transmite de forma entusiasta a su grupo. Este álbum es realmente algo especial.
Brad Mehldau trío, compuesto además por el batería Jeff Ballard y Larry Grenadier al contrabajo, sin duda uno de los tríos más originales de la escena del jazz actual, son una aplastante máquina de hacer música, con momento álgidos, brillantes, con luz y telepáticamente compenetrados, aunados, con la improvisación como uno de sus fuertes, según el pianista de Florida "la melodía debe convertirse en algo emocionante y dinámico para todo el grupo, así el líder solo tiene que seguir el esquema fijado y dejar que la improvisación conforme la buena música y discurra hasta donde deba llegar, sin rigidez, disfrutando, entonces es cuando se empieza a grabar". Así surge Ode, sus 11 temas, todos compuestos por Mehldau, en los que juega con su particular lirismo, discurriendo entre los sonidos intensos, íntimos y como no, sus sonoros silencios, elevando la interpretación hasta el punto de la máxima excelencia.
La duración del disco es de unos 65 minutos, se graba para Nonosuh Récords el 17 de noviembre de 2008, excepto los temas 3,8 y 10 que se graban el 19 de Abríl de 2011. Los temas están dedicados a personajes reales como su hijo, o el actor Jack Nicholson, o en "Aquaman" un tema inspirado en un personaje de comic, abre el disco con el teme MB, como homenaje al gran saxo ya fallecido Michael Brecker, el tema fue compuesto seis meses antes de su muerte y es que Mehladu es un ávido constructor de melodías que le sirven para explorar constantemente su lado más creativo en el aspecto musical, rítmico y armónico. Todo el material de Ode es uno diverso y compacto a la vez donde surfea por el jazz, el rock o el pop en su origen, navegando entre un marco de improvisación de jazz y un formato de canción pop más lineal.
El álbum es la excusa perfecta para disfrutar de la maravillosa forma de componer y de interpretar el piano que tiene este gran músico contemporáneo.

De 5 > 10, mi valoración es: 10

Te dejo un vídeo de Ode:


lunes, 9 de julio de 2012

Thelonious Monk: Brilliant Corners

Caratula del disco
Brilliant Corners es seguramente la obra maestra de Monk y la más perdurable en el tiempo, uno de los más hermosos y uno de los mejores discos de la historia del jazz. Lo que supuso para Thelonious Monk (1917-1982) fue un reto, una firme reivindicación después de serle retirada por un asunto de drogas la licencia como músico, estuvo más de un lustro sin poder tocar en los clubs de NYC. Brilliant Corners es aire fresco para Monk, así en otoño de 1956 tuvo la oportunidad de grabar un álbum con temas propios y con los mejores músicos disponibles y Monk no perdió esta oportunidad, compuso tres de los cinco temas con los que cuenta el álbum, siendo el tercer disco que graba para Riverside, se hizo en tres sesiones el 9 y 15 de octubre y el 7 de diciembre de 1956, lo produce Orrin Keepnews y cronológicamente se sitúa entre "The unique Thelonious Monk" (1956) y "Thelonious Hinself" (1957), se lanza al mercado en 1957.
La grabación cuenta con cinco temas y tiene una duración cercana a los 43 minutos. El primer corte homónimo es una compleja composición, conocida por su extraña melodía y la duplicidad del tempo, que necesitó más de 25 tomas diferentes para finalmente sólo ser posible gracias a un empalme de dos tomas distintas, un tema audaz que nunca ha perdido su poder para sorprender y seducir décadas después. El otro tema por importancia es "Pannonica", el tercer corte y dedicado a su protectora Nica Rothschild, la baronesa de Koeningswarter, en cuya casa murió cuidado por ella, una década después de retirarse bruscamente de la vida pública. "Pannonica" es un tema que destaca por dos razones, la primera porque Monk toca la celesta un instrumento a medio camino entre el piano y el vibráfono y simultánea piano y celesta y el segundo motivo es porque Sonny Rollins hace una interpretación genial y uno de sus mejores solos de baladas, es como si el saxofonista hubiera poseído e interiorizado la composición de Monk y éste le respondiera cariñosamente metiéndose en su solo.
Los músicos que acompañan a Monk son: Ernie Henry con el saxo alto, Sonny Rollins al saxo tenor, Oscar Pettirford y Paul Chambers en el doble contrabajo, Max Roach en la batería y Clark Terry con la trompeta. Rollins y Monk vertebran el disco y Max Roach une al grupo con su capacidad polirrítmica.
Pocos músicos tienen la originalidad de Monk, uno de los padres del Be Bop, estrafalario, pero con lógico rigor, que le hace dueño de esas melodías truncadas, distorsionadas, de esos patrones que permiten la interrupción repentina del ritmo, esos extraños vericuetos difíciles de entender, esa música que suena con aspereza urbana, que le hace artífice como innovador y aportar al jazz un sonido nuevo, distinto, diferente, supuso un hito musical en su momento. Thelonious Monk personificó la originalidad artística, la indiferencia a las normas y su excentricidad personal para realizar interpretaciones y composiciones cargadas de elegancia y una extraña belleza.

De 5 > 10, mi valoración es: 10

Un video con el tema "Brilliant Corners"


viernes, 6 de julio de 2012

Stan Getz: Voyage

Voyage se edita en primera instancia como un álbum de Kenny Barron, pianista que lo acompañó durante la última década de su vida, en efecto Barron compone dos temas del disco y tiene un papel protagonista en toda la grabación, pero quién de verdad capitaneaba y hacía de líder, era sin dudarlo Stan Getz (1927-1991), el saxofonista de Filadelfia, "The Sound" como se le conocía en el mundillo del jazz. Con este disco nos encontramos a un Getz en su etapa madura como músico, una época muy prolífica en grabaciones donde Getz da rienda suelta a toda la sabiduría musical que tiene acumulada desde hacía cuatro décadas desde sus inicios como músico y Voyage es un buen ejemplo de lo que digo, es la obra cumbre de su madurez, no en vano el disco está incluido en el libro " los 100 mejores discos de Jazz". Se le nota pleno, álgido, elevado, controlando la situación al frente de su banda  con un estilo bien pulido, con tonos y melodías suaves, silenciosos, líricos, incluso algo triste por momentos, con reminiscencias del pasado, con aires lejanos a Bossa Nova y más lejanos de sus influencias de Lester Young (aquí Charlie Parker se nota menos), de alguna manera un retrato "vintage" de Getz, destaca sobretodo en las baladas donde se eleva hasta la cima esculpiendo sueños tejidos de notas impecablemente ejecutadas.
Voyage se graba en L.A., California, el 9 de marzo de 1986 para el sello discográfico Black Hawk, de estilo Cool, cuenta con un total de seis temas, uno de Victor Lewis, otro de Victor Feldman, dos de Kenny Barron y tres estándares, un total de 50 minutos mágicos en el que Getz nos deleita con su saxo tenor, Kenny Barron nos maravilla con el piano y los fraseos y juegos entre piano y saxo, además están Victor Lewis en la batería, Babatunde en la percusión y cepillos y George Mraz en el bajo, una sección rítmica que nos hipnotiza constantemente. Curiosamente Voyage tema que cierra la grabación y da nombre al álbum, quizá sea el tema más flojo de todos, "I Thought About You" es estusiastamente lírico, una corriente romántica que se extiende a otros temas como "Yesterdays", "Dreams" o " Falling in love".
Lo mejor del disco el diálogo continuo entre Getz y Barron donde ambos tienen oportunidad para lucir sus habilidades musicales, creando momentos emotivos, sugerentes, altamente creativos, de un dialogo sin igual. Stan Getz "The Sound" demuestra un dominio absoluto del instrumento, por algo ha sido uno de los más brillantes estilistas de toda la historia del jazz y un auténtico revolucionario en la historia de este género.
El disco no es recomendado, es necesario en tu biblioteca y en tu memoria musical.

De 5 > 10, mi valoración es: 10

Te dejo un vídeo con el tema "Yesterdays"


miércoles, 4 de julio de 2012

Monty Alexander: Uplift

El álbum es una colección de diez canciones, tres de ellas compuestas por Monty Alexander, las tres últimas del disco y que describen un maravilloso paisaje Jamaicano salpicado de grandes dosis de Monk, el resto son estándares, el primer corte es " Come fly whith me" ya oír este clásico te pone las pilas, a destacar otros temas como "Sweet Georgia brown", "Django" o " Body and Soul", tiene una duración total de 62 minutos, se graba en un periodo de tres años (2007-2010) por diferentes conciertos y se edita en 2011 para Jazz Legacy Productions.
El pianista se encuentra respaldado por el excelente bajo Hassan Shakur y el batería Herlin Riley que ha grabado varios temas con Wynton Marsalis, también en dos pistas toca el batería Frits Landesbergen. El pianista Jamaicano siempre se ha caracterizado por su versatilidad y la capacidad de incluir los ritmos caribeños con naturalidad, sin que se note en estándares del jazz y ofrecer toques muy personales en temas clásicos, todo ello con esa técnica extraterrestre y el swing que surge a borbotones de sus dedos, despistando al oyente incluyendo instrumentos ocasionalmente raros o dando giros inesperados, introduciendo ráfagas de melodías ajenas a la melodía troncal. Monty es un músico autodidacta, sublime, sincero, espontáneo que sabe conectar y transmitir lo que lleva dentro, reinventando el ritmo en cada nota con magistral pulso, girando del blues al jazz, a ritmos caribeños o a cánones de música occidental y es que como dice el autor "la música es una fuerza sanadora" afirmación con la que no puedo estar más de acuerdo.

De 5 > 10, mi valoración es: 8


martes, 3 de julio de 2012

Gerry Mulligan Quartet: Dragonfly

Dragonfly es el último disco de estudio de Gerry Mulligan (1927-1996), se graba en 1995, sale a la calle el  23 de octubre de ese mismo año, pocos meses después fallece. Cuenta con un total de diez temas todos compuestos por el saxofonista  Neoyorkino y tiene una duración de 63 minutos. El álbum es una colección que sirve de epitafio perfecto y que inmortaliza al autor, todos los temas son una maravilla musical "cuasi perfectos", de una calidad celestial, uniforme, no existen contrastes bruscos y el tono empleado en la mayoría de ellos es lento/medio tipo baladas, hasta el orden de los mismos parece minuciosamente estudiado al detalle para que el conjunto resulte exquisito. Desde que salió es uno de mis discos favoritos, de los que no te cansas de oír, porque en cada escucha descubres algo nuevo y siempre, siempre te invade la misma sensación de belleza. La grabación está meticulosamente realizada, sin duda se nota el pasado como arreglista de Mulligan, sin una nota fuera de lugar, todo en su sitio, fácil de escuchar, de tararear, fácil de recordar y es que lo bueno no tiene porque ser complicado, Cool en estado puro. Lo produce el mismo autor y John Snyder.
Los créditos están formados por Dave Grusin en el piano, fresco, ágil, limpio, brillante, Dave Samuels está impecable con el vibráfono, John Scofield nos demuestra su virtuosismo y calidad con la guitarra, Warren Vaché toca la corneta un instrumento poco jazzístico y Grover Washington Jr. toca el saxo tenor y soprano realizando muy buenas combinaciones con Mulligan, además de este quinteto refuerza los metales incorporando a Luis Bonilla y Jim Pugh en los trombones, Dave Taylor en el trombón bajo y Bobby Milliken y Byron Stripling tocando el fliscorno y la trompeta, el resultado es una elegante y potente línea de metales, en la sección rítmica están Dean Johnson en el bajo, Ted Rosenthal en el  piano y Vicente Ron en la batería, entre las dos formaciones conforman los distintos temas del disco.
Como estrella deslumbrante dirigiendo toda la grabación se encuentra el saxo barítono Gerry Mulligan, tocando su tremendo saxo de una manera ágil y fresca como si de un saxo alto se tratase, de manera reflexiva, demostrando muy buen gusto, poniendo especial énfasis en las baladas donde deja desbordar toda su lírica, dando lugar a una música que surge del corazón, oscilante, con fraseos interesantisimos entre saxo barítono-guitarra-saxo tenor, con arreglos inteligentes y discretos, el resultado es uno de los discos más bellos y elegantes de todos los tiempos.

De 5 a 10, mi valoración es: 9

Te dejo un vídeo con el tema que da nombre al disco y que abre el álbum:



lunes, 2 de julio de 2012

Bill Evans: Symbiosis

Simbiosis, si lo buscamos en el diccionario define al término como "la asociación de organismos de diferentes especies que viven juntos y se benefician mutuamente". Para empezar el disco es atípico, una rareza dentro de la carrera de Evans, aunque no es el único que ha grabado con grandes orquestas, sí es el mejor de ellos, en esta Symbiosis aparecen por un lado el autor de la obra que no es otro que Claus Orgerman (muy conocido por sus arreglos a Tom Jobim), por otro lado encontramos al intérprete, al pianista Bill Evans y como tercer elemento los distintos estilos musicales que hay en la obra. Todo ello bien agitado dan como resultado este álbum.
En Symbosis encontramos influencias de George Shearing, Dave Brubeck o Nat King Cole, de Brahms,  Debussy,  Bela Bartok o Stravinsky, filtradas por autor e interprete, son dos músicos, dos estilos, dos formas diferentes de ver y sentir la música y cada uno de ellos saca lo mejor del otro, hasta converger en infinidad de puntos, consiguiendo un poderío sonoro inigualable llenos de sensibilidad, armonía, belleza que se mete en nuestra piel y atrapa todos nuestros sentidos porque la música es universal y más allá de los estilos está la música en sí misma y aquí nos deleitamos con el "feeling" que se produce entre la música impresionista, los compositores rusos del principios del siglo XX y lo más conceptual del clasicismo y por otro lo más refinado del jazz, hasta conceptos de minimalismo, o aires lejanos de samba, arreglos de cuerda con aroma a música de cine. Estos son los verdaderos ingredientes de Symbiosis.
El álbum se graba los días 12, 13 y 14 de febrero de 1974 en  los estudios de la Columbia en NYC, la versión en vinilo se agotó enseguida y no se edita en formato CD hasta 1994. El disco cuenta con dos movimientos el primero de ellos con tres partes y el 2º con dos partes, tiene una duración total de 41 minutos, está compuesto y arreglado por Claus Orgerman e interpretado por  Bill Evans  que simultanea el piano Steinway y el piano eléctrico Fender-Rhodes, muy apropiado éste último para alguno de los pasajes de la obra. Además está Eddie Gómez al contrabajo y Marty Morell en la batería que conforman el trío de Evans en la época. Por otro lado una orquesta dirigida por David Naidem (de la New York Philarmonic Orchestra) entre las que se encuentran Ralph McDonald en las congas y Phil Woods al saxo alto.
En la obra Bill Evans interpreta con una técnica impecable un swing lento y suave de jazz con largas interpretaciones del piano eléctrico Rhodes que se apoderan de nuestro oído por su resplandeciente belleza y complejidad armónica, Evans sabe de forma sabia donde utilizar el piano acústico o el eléctrico.
Symbiosis es una obra demasiado importante como para ser ignorada por parte del mundo del jazz. Bill Evans hace que la obra alcance la categoría de obra de arte con una técnica y un estilo conmovedor que pocos pianistas clásicos o de jazz hubiesen conseguido. En palabras de Orgerman "no me imagino otro pianista interpretando mi obra". En definitiva se trata de un gran álbum que se encuentra totalmente separado del resto de su producción. Si lo encuentras cómpralo.

De 5 a 10, mi valoración es: 9

Te dejo este vídeo como aperitivo, 2º Movimiento, parte a)