lunes, 1 de diciembre de 2014

The George Shearing Trio: Windows


Músico ciego y pianista, la imagen me lleva a un garito lleno de humo, whisky y donde el murmullo es tan grande que casi no oyes la música, una jam sesion y es que muchos de los mejores músicos de la historia del jazz han forjado su biografía en estos tumultuosos e irrespetuosos garitos, sobre todos pianistas, la mayoría anónimos y olvidados, aunque ahí estuvo Billy Joel, acordándose de todos ellos con su piano man. Todo un topicazo. Ahí está George Shearing, aunque la grabación es limpia y de estudio, mentalmente te traslada al ambiente antes descrito y es que el músico inglés, supo guardar el equilibrio entre lo popular y lo culto, en ambos ambientes se manejaba con comodidad.
En Windows, George Shearing graba con su trío, un disco abierto a distintos ambientes y estilos, él siempre guardó el equilibrio entre el swing, el bop o el cool, así interpreta en el álbum a autores como Oscar Pettiford, Chick Corea, Bill Evans, Miles Davis o coquetea con un tema de Ravel, así con toda naturalidad, toma a estos autores los echa en la coctelera, los mezcla y el resultado es este disco elegante, sencillo, con marchamo personal inconfundible, con un trío donde prescinde de la batería y él lidera con el piano, dialogando con el guitarrista Louis Stewart y el bajo Niels Henning Orted-Pedersen da un sinuoso toque de armadura y volumen al conjunto, creando un ambiente íntimo, cercano, suave, muy agradable, sin alardes de virtuosismo, pero con todos los elementos necesarios para escuchar buen jazz.
El disco se graba en los estudios de la MPS en 1977, cuenta con un total de 10 temas y es de esas grabaciones que se hacen grandes por su sencillez, además la combinación piano, guitarra y bajo suena a gloria.

Valoración personal: 8


lunes, 3 de noviembre de 2014

Quincy Jones: "This Is How I Feel About Jazz"


Quincy Jones siempre ha estado ligado al mundo del jazz, desde sus comienzos en los años cincuenta y sesenta, sin embargo es más conocido por otras facetas siempre relacionadas con la música, como productor, director o arreglista de música pop, de bandas sonoras para el cine, fue el productor del Thriller de Michael Jackson. Sus orígenes fueron en la sección de trompetas de Lionel Hampton, aunque pronto daría el paso a formar su propia Big Band, así aunque era un trompeta discreto, con tan sólo algunas sesiones aisladas en NYC, en 1956 tiene su primera oportunidad de grabar un álbum,  para el sello ABC, Paramount, así fue como nació This Is How I Feel About Jazz, con sólo 23 años reúne al mejor elenco de músicos que por entonces había en la ciudad de los rascacielos: Art Farmer, Clark Terry, Joe Wilder, Jimmy Cleveland, Phil Woods, Jerome Richardson, Herbie Mann, Zoot Sims, Lucky Thompson, Milt Jackson quien por cuestiones contractuales aparece bajo el seudónimo de "Soul Brother", Charles Mingus, Paul Chambers, Billy Taylor, Hank Jones y muchos otros. Muchos de estos músicos habían compartido sesiones con Jones, pero no eran un equipo, ni siquiera existió un sentido de pertenencia a este proyecto.
El álbum incluye seis pistas en tres sesiones separadas, las dos primeras sesiones se grabaron con formaciones de ocho o nueve músicos, la última fue con quince miembros, lo que ya constituía una Big Band más tradicional. 36:32 minutos, seis temas entre los que destacan A Sleepin Bee, Walkin o Stockholm Sweetnin, creado en homenaje a Clifford Brown, quien murió en un accidente automovilístico a primeros de 1956 y que hubiese participado en la grabación de este disco, de alguna manera su espíritu está latente en toda la grabación. La pasión que Jones tenía por el jazz se hace ver durante todo el álbum, una pena que en los setenta abandonara definitivamente el mundo del jazz.

Valoración personal: 9



domingo, 26 de octubre de 2014

Art Tatum Solo Masterpieces


Caja de ocho discos con la colección completa de piano solo que Norman Granz encargó al legendario Art Tatum, tres años de grabación que coincidieron con la plenitud del pianista y también con el final de sus días, en total 119 solos de piano, 12 horas de música.
Casi ciego, se sintió condenado en vida a tocar jazz, porque las puertas de la música clásica se le cerraron. Autor de una técnica fenomenal, con una gran capacidad para improvisar de forma intrincada. Tatum cogía una idea simple y extraía de ella todas las ramificaciones imaginables y también inimaginables, lo hacía con sofisticación, pero sin extravagancia, para luego embellecer el desarrollo de la pieza con adornos elaborados y complejos alrededor de la melodía.
Las grabaciones son densas, intensas, requieren atención y no una escucha pasajera, porque están llenas de estilos y ricas sutilezas del mundo del jazz y de su sabiduría clásica. El resultado es una colección única llena de buenas e inspiradas improvisaciones que en su día, revolucionaron a los pianistas de jazz, quien lo consideraban un genio de genios y cuyas influencias han llegado hasta nuestros días pasando por generaciones de pianistas.
Art Tatum con este songbox nos ofrece un rico banquete de improvisación y genialidad y muy importante es una música, donde además de técnica utiliza los sentimientos y eso se transmite en cada nota que sale del blanco y negro del teclado de su piano.

Valoración personal: 10



domingo, 5 de octubre de 2014

Kenny Burell & John Coltrane


Magnífico escaparate de ambos músicos, guitarra y saxo tenor juntos, la primera vez que Coltrane se atreve a dialogar con éste instrumento y la única que hace un dueto guitarra-saxo, es en el primer corte del álbum "Why was i born?", 3:11 minutos maravillosos en una combinación íntima, lírica, sensual, de gran belleza, un auténtico regalo para el alma, donde Burrel y Coltrane se encuentran en un inmejorable momento, aún estarían por venir las mejores grabaciones de ambos, pero ya sería por separados, ya que este fue su último disco juntos. La sesión se grabó el 7 de marzo de 1958 en los estudios de Rudy Van Gelder, cuenta con un total de 5 temas y una duración total de 37:24 minutos, además de Burrell a la guitarra y Coltrane al saxo tenor, el resto del quinteto está formado por Tommy Flanagan al piano, Paul Chambers al bajo y Jimmy Cobb a la batería, cinco maestros que dialogan sin parar durante todo el disco, donde Flanagan tiene también un gran protagonismo sobre todo en el 2º corte "Big Paul", un blues que dura 14:03 minutos, donde cada miembro del quinteto despliega sus mejores artes para lucirse ante el resto.
Es uno de los discos más olvidados de Trane, cuando en realidad es una maravillosa "Jam Session", quizá influye que sólo un mes antes grabó "Soultrane" y éste eclipsa este maravilloso disco, sin embargo lo que hace especial este disco es la contribución de los cinco miembros, lo que en un principio parece el lucimiento de los dos co-líderes, al final es un esfuerzo de grupo, donde cada uno busca el centro de atención. El tono general es agradable, relajado, por momentos íntimo y sobre todo de muy buenas vibraciones entre los músicos, lo que se traduce en que esas buenas vibraciones se transmiten en su escucha.

Valoración personal: 9,5



sábado, 27 de septiembre de 2014

Jim Hall: Live!


El álbum se graba en Toronto el 10 y 11 de septiembre de 1975, el guitarrista Jim Hall conforma un trío con el bajo Don Thompson y el batería Terry Clarke, entre los tres supieron abstraerse de la corriente setentera del momento y ofrecernos un post bop de mucha calidad. La grabación capta a un Hall en uno de sus mejores momentos, donde nos recrea con solos de guitarra largos, algo que no es habitual en él. El disco que tiene una duración de 41:29 h., cuenta con 5 temas todos ellos estándares, Hall usa su gran imaginación y maestría para no caer en clichés o patrones que nos suenen repetitivos, consiguiendo que la grabación que es en vivo, tenga una espontaneidad y frescura que a veces le falta a las grabaciones de estudio.
El rasgueo de Hall a las cuerdas de su guitarra es lento, pausado, a veces entrecortado, relajado, además increíblemente sofisticado, realizando un trabajo sutil e inteligente, donde en cada escucha se descubren nuevos elementos y matices. El éxito del álbum se debe principalmente a la interacción de los tres músicos, todos tocando a un mismo nivel, Don Thompson en particular es casi otro guitarrista tocando a dúo con Hall, por su parte Clarke controla las baquetas con maestría y mucho estilo.
El guitarrista de Búfalo, nos dejó un gran legado con este gran álbum que huele a música fresca, llena de sutilizas elegantes, interacciones muy estudiadas y a la par espontáneas y ese toque y estilo tan característico de Hall que le hace inconfundible. Tengo el vinilo desde finales de los setenta y lo guardo como lo que es: un tesoro.

Valoración personal: 9


domingo, 21 de septiembre de 2014

Kenny Clarke: The Detroit Jazzmen


A mitad de los cincuenta Kenny Clarke triunfa con un quinteto para el sello Savoy, los componentes eran el veterano y afamado Paul Chambers con el contrabajo, más tres recién llegados a esto del jazz: Peppers Adams con el saxo barítono, Kenny Burrell con la guitarra y Tommy Flanagan al piano, Kenny Clarke además de liderar se encargaba de las baquetas. Fueron varias las grabaciones que se hicieron para el sello Savoy entre originales y estándares, éste álbum en concreto, se graba entre el 30 de Abríl al 9 de Mayo de 1956, en Nueva Jersey, todo supervisado por el gran olfateador Rudy Van Gelder. Una grabación de alta calidad, donde cada uno de los músicos está a un alto nível, Clarke sublime durante todo el disco, balanceado y arropado por Chambers y con un Kenny Burrell que despunta ligeramente sobre el resto, entre todos nos dan una lección de puro bop, lleno de unidad rítmica y sutileza, un pulso musical que tanto la banda como el oyente puede oír y sentir, esa fue la fuerza motriz de estas grabaciones.
Destaca el equilibrio de los componentes de la banda, no sobresale ninguno de manera especial por encima de nadie, incluso Kenny Clarke, se acomoda a este equilibrio y no realiza ningún solo durante la grabación, el resto de instrumentos aparecen y desaparecen de forma fluida y natural, dejando en cada nota un trabajo compacto, relajado y bien elaborado.
La versión original de vinilo, del que me precio tener una copia, está agotada, siendo posible conseguir una versión digital en CD que además tiene un bonus track sobre los siete temas originales del LP. Por trabajos como éste Clarke está considerado como uno de los padres de la batería moderna.

Valoración personal: 9

Vídeo con el corte nº 2 Your Host



sábado, 23 de agosto de 2014

Bill Evans Trío: Sunday at The Village Vanguard


Una de las mejores grabaciones en directo de la historia del jazz. Grabación en vivo el 25 de junio de 1961, en cinco sesiones, dos de mañana y tres de tarde. El mejor trío que tuvo Evans: Scott LaFaro al bajo y Paul Motian en la batería, LaFaro muere diez días después de estas grabaciones, lo que reviste las mismas de un halo especial, ya que la empatía demostrada por Evans y LaFaro ha sido de las mejores simbiosis que se han dado nunca en jazz, LaFaro cimentó en este disco su gran prestigio como un grande del jazz, manteniendo un diálogo continuo de tú a tú con el teclado de Evans, sin destrozar el resultado final, una interacción increíble, casi telepática. Todo ello, puede parecer que relega a un tercer plano la actuación de Paul Motian, nada más lejos de la realidad, el batería toca exquisito, elegante, refinado y sobrio, fue el perfecto apoyo y complemento para el trío. De todos modos, es inevitable que el álbum haya pasado a la historia en gran medida, como un homenaje a la contribución de LaFaro, sin embargo la idea original de Evans fue la de crear una idea revolucionaria e insólita para la época, como era la interacción total de los tres miembros del trío. Hasta entonces el solista lucía sus habilidades con un acompañamiento rítmico, lo que es cosa bien distinta.
Belleza, sensibilidad, armonía, elegancia, es el contenido de estas grabaciones legendarias en directo y que todo el mundo debería conocer. Casi que aún se puede oler el humo que flotaba en el ambiente.

Valoración personal: 10



lunes, 21 de julio de 2014

Roland Kirk: The Inflated Tear


Primer álbum de estudio para la Atlantic Records, se grabó entre el 27 y el 30 de junio de 1967 y se lanzó al mercado el 14 de junio de 1968, cuenta con 9 temas, uno de ellos de Duke Ellington, el resto compuestos por Kirk, en 1998 se digitaliza y se edita en CD, además contiene un bonus track, un tema de Jimmy Dorsey, son sólo 37:43 minutos de música distinta.
The Inflated Tear, es un álbum excelente de este gigante del saxo tan subestimado, contiene composiciones diversas, que discurren por diferentes estilos y escuelas de jazz, el disco comienza con una marcha fúnebre de Nueva Orleans, interpretada con todas las connotaciones que requiere el tema, de ahí se desliza al blues, entra en territorio Ornette, y de ahí a una sorpresa y otra y otra. Desafiante y a la vez accesible, en cualquier caso una rara combinación, pero especialmente rara en el "todo vale" del jazz de los sesenta. Roland Kirk nos ofrece en The Inflated Tear una impresionante paleta de sonidos, ritmos, matices y reflexiones eclécticas que son evidentes y muy gratificantes en esta grabación, pero sobre todo es original e inclasificable.
Los créditos son un cuarteto compuesto por Roland Kirk, soplando el saxo tenor, el manzello, el clarinete, la flauta o el cuerno inglés, incluso silba, una de las habilidades de Kirk además de ser multiinstrumentista es que tiene la habilidad de soplar dos o tres instrumentos simultaneamente, motivo por el que recibió el castigo de muchos críticos de jazz, los mismos que más tarde le alabaron. El resto del cuartelo lo conforman Ron Burton al piano, Steve Novosel al bajo, Jimmy Hopps en la batería, todos muy bien compenetrados y capaces de transportarnos a lugares musicales muy poco frecuentados.

Valoración Personal: 9



sábado, 12 de julio de 2014

Charlie Haden & Pat Metheny: Beyond The Missouri Sky


No soy amigo de escribir un post por la ida de un músico, más bien oigo su música, hoy ha fallecido el gran bajista Charlie Haden, D.E.P. Haden me ha acompañado musicalmente durante las últimas décadas, desde el Free Jazz de Ornette Coleman hasta las tranquilas y sosegadas composiciones de sus últimos años, en ambos lados de ese péndulo me encuentro cómodo. En estos momentos de tristeza he ido a mi biblioteca musical y he elegido el disco maravilloso que grabó con su paisano Pat Metheny "Beyond The Missouri Sky", grabado en 1996 y lanzado al mercado el 25 de febrero de 1997 para la Verve Récords, cuenta con un total de 13 temas, 3 de Haden, 1 de su hijo Josh, y 2 de Metheny, algún otro tema con aire cinematográfico de Henry Mancini o Ennio Morricone, en total 69:11 minutos maravillosos.
Es sin duda, un sublime dueto, que trasciende el género, ambos compartiendo el linaje de Missouri, como argumento temático, entre ambos maestros forjan un estilo lírico, íntimo, acústico, centrándose en la pureza del tono y la armonía. Metheny hace predominar las guitarras clásicas y Haden moviéndose con toda facilidad por los registros altos de su instrumento, ambos dando un ejemplo de coherencia emocional y musical, en un dialogo generacional bello, una sólida comunicación musical que transciende sus respectivos caminos profesionales, profundizando en los ámbitos de la calma, la tranquilidad, a través del minimalismo, una compartida visión musical de los orígenes y del alma, desarrollan una complicidad tierna, delicada en un discurso musical simple: Guitarra y Contrabajo.
Beyond The Missouri Sky, es un disco bello y emotivo, para momentos especiales, si tuviera que definirlo con una imagen sería la de unas hojas flotando por la lenta corriente de un bello arroyo. Gracias Haden.

Valoración personal: 8






lunes, 30 de junio de 2014

Charles Lloyd Quartet: Fish Out Of Water


Primera de una serie de grabaciones que Chalres Lloyd realiza en los noventa para el sello ECM, Fish out of water, pone fin a una larga y voluntaria reclusión, Lloyd fue el primer artista de jazz en vender en los sesenta más de un millón de discos, adoptó la estética hippie, compartió cartel con Janis Joplin o Jefferson Airplane, se vistió y vivió como ellos, amasó mucho dinero y se estableció en Malibú, codeándose con las estrellas, lo que le llevó a abandonar las actuaciones en público y a su retiro. Tras casi dos décadas, regresa con Bobo Stenson al piano, Palle Danielsson al bajo y Jon Christenssen a la batería, todos ellos escandinavos afamados y de largo recorrido musical.
Fish out of water, es un disco excepcionalmente bueno, lo primero que se percibe es la buena calidad del sonido, un ritmo íntimo, lírico, relajado durante toda la grabación, con alma de blues, donde cada instrumento suena individualmente y no como parte de una amalgama. Suena tan natural que parece haber nacido con el saxo en sus brazos, con esa forma de tocar fluida, sin esfuerzo pero con vigor, un maestro.  El álbum fue grabado en julio de 1989 y puesto a la venta en 1990, se graba para ECM, cuenta con un total de siete temas (57:48 minutos) todos compuestos por Lloyd, donde crea un marco armónico único y continuas invenciones melódicas, dando lugar a un paisaje sonoro diferente a lo conocido en jazz, a veces las melodías son inconclusas, otras se desvanecen ante el piano de Stenson, es en ese momento cuando coge impulso y regresa para ejecutar un solo que te lleva a una catarsis emocional. La sección rítmica ofrece un soporte suelto, etéreo por momentos, moderno y virtuoso, hay tempo para escucharse los unos a los otros, incluso cuando Lloyd no está tocando, existe una línea delgada que conecta cada tramo de silencio.

Valoración personal: 9



domingo, 22 de junio de 2014

Art Blakey Jazz Messengers: "Live at Café Bohemia"

El Café Bohemia apenas duró dos años, era un local de NYC al que su dueño, un aldenao llamado J. Garafolo, había orientado en otro tipo de actividades distintas al jazz, hasta que una noche tuvieron que echar a alguien que apoyado en la barra había bebido brandy sin parar y además no pudo pagar, una semana después éste cliente apareció en el bar ofreciéndose a tocar a cambio de saldar su deuda, Garafolo, con tal de cobrar aceptó el reto y llegaron a un acuerdo, ese alguien era Charlie Parker, abrumado por la gran cantidad de gente que acudió al local, decidió dar continuidad a los conciertos de jazz, así contrató una de las primeras actuaciones de Art Blakey con los Jazz Messengers, la formación estaba compuesta por Art Blakey como batería y líder, Horace Silver al piano, Kenny Dorham en la trompeta, Hank Mobley al saxo tenor y Doug Watkins al bajo, casi nada.
El 23 de noviembre de 1955 se grabó una actuación en vivo para la Blue Note del que luego saldrían dos álbumes, que por derecho propio han pasado a ser considerados como de los mejores del Hard Bop y de la formación liderada por Blakey. El Vol. 1 cuenta con nueve temas y 41:54 minutos, mientras el Vol. 2 cuenta con ocho temas y 62:15 minutos, la grabación es excelente y el sonido puro Hard Bop en ebullición, unos músicos compenetrados, entusiasmados, donde ya se insinuaban las grandes cosas que estaban por venir.
Hay en toda la grabación, flotando entre las notas, una combinación de potencia, melodía, swing y sentimiento de blues, que ya nunca después fue captado en un disco. Dorham con su trompeta y Mobley con su saxo tenor hacen un frente común formidable, Horace Silver co-lider de los Messengers con Blakey y el bajo Watkins están soberbios durante toda la actuación. Super Jazz del que no puede faltar a un buen aficionado.

Valoración Personal: 9




domingo, 15 de junio de 2014

Francy Boland: Fellini 712

A finales de los sesenta, el Jazz había dejado de ser en los Estados Unidos una música popular para ser sólo de interés para una élite. El Rock ocupaba todo el espacio musical y las intrincadas armonías de Coltrane o Davis pasaron a otro plano. La sociedad norteamericana casi exilió a la mayoría de grandes boppers, quienes desembarcaron en Europa, se afincaron y se mezclaron con músicos europeos recorriendo con éxito los clubs de toda Europa, sobre todo, del norte. Así nace la Clarke-Boland Big Band o CBBB, una Big Band con origen fuera de los Estados Unidos, colideradas por el gran batería Kenny Clarke y el pianista Belga Francy Boland, siempre producidos y alentados por el productor Gigi Campi, quienes lograron reunir desde 1961 a 1973 varios músicos norteamericanos y europeos, la formación de la CBBB fue siempre muy estable, a pesar de lo numerosa que era. La Big Band, logró  realizar grabaciones de muy alto nivel, una de ellas es este vinilo Fellini 712 grabado los días 2 y 3 de diciembre de 1968 para el sello MPS, con una duración total de 33:48 minutos, se trata de una suite en tres movimientos compuesta por Francy Boland, se grabó en los estudios Lindströn de Colonia (Alemania).
Los créditos son Kenny Clarke como batería y co-líder, Francy Boland en el piano y co-líder, Benny Bailey, Idress Sulieman, Dusko Gojkovic y Jimmy Deuchar en las trompetas, Ake Persson, Nat Peck, Eric Van Lier en los trombones, Derek Humble, Johnny Griffin, Ronnie Scott, Toni Coe, Sahib Shihab en saxofones, flautas y clarinetes, Jean Warland al contrabajo y Kenny Clare en la batería, éste último de nombre casi idéntido al co-líder Kenny Clarke, sólo una k les diferencia, dos baterías que hicieron de auténtica locomotora impulsando la orquesta.
Entre esta mezcolanza de músicos de distintos orígenes la CBBB consiguió un sonido de Big Band nuevo, original e individual, inconfundible, la formación clásica de Francy Boland liderando junto al creador del MJQ dan como resultado un sonido fresco, pero con raíces en la época clásica de las grandes Bigs Bands, los arreglos de Boland son magníficos, uniendo las diferentes cuerdas de la orquesta de forma compacta y a la par dejar espacios para el lucimiento de los solistas. Fellinin 712 marcó un hito importante para la CBBB, una suite con variaciones y un mismo hilo conductor, los músicos navegan con mucha habilidad entre los complejos arreglos de Boland y el constante diálogo entre solistas sobre todo los tenores Griffin, Scott y Coe. Una Big Band distinta.

Valoración personal : 8




domingo, 8 de junio de 2014

Thelonious Monk: Monk´s Blues

Thelonious Monk es uno de esos músicos con mucho peso especifico, poseedor de un estilo único y personal, su música se ha extendido a generaciones de músicos que le han venerado por excéntrico y adelantado a su tiempo. Me gusta el Monk de formaciones pequeñas o el mejor Monk enfrentándose solo al blanco y negro del teclado de su piano, ahí, en las distancias cortas era un gigante. En 1968 decide dar un triple salto mortal y hacer algo que nunca antes hizo, tocar con una Big Band, Monk´s Blues, grabación detestada y muy criticada por los snobs del jazz, sobre todo por la dirección que estuvo a cargo de Oliver Nelson y que no estuvo a la altura del personaje, lo mismo que el productor Teo Macero que incluye dos temas livianos, superficiales y que dañan la imagen de Monk, además el piano no luce como se merece, se asfixia detrás de unos vientos sobreexcitados, aún así es Thelonious Sphere Monk y el álbum nos guarda momentos inéditos, por poder oír a Monk con una Big Band y momentos donde el piano gana por goleada a la multitud de instrumentos que intentan ir al unísono, si bien se aprecia que el pianista de Rocky Mount se maneja mejor en ambientes más íntimos y relajados.
El disco se graba para la Columbia Récords, tiene en su edición en vinilo nueve temas, a los que en 1994, en la edición digital en CD se añaden dos nuevos temas Blue Monk y Round Midnight, ésta última en sólo piano en vivo, la duración total del disco es de 56:27 minutos. Los créditos son: Thelonious Monk al piano, Larry Gales al bajo, Ben Riley y John Guerin a la batería, Ernie Small, Gene Cipriano, Buddy Collette y Tom Scott en la cuerda de saxofones, Bobby Briant, Freddie Hill y Conte Candoli en la cuerda de trompetas, Lou Blackburn, Bob Bralinger, Billy Byers y Mike Wimberley en trombones y Howard Roberts en la guitarra.
Una obra atípica, de un autor atípico, donde encontramos interpretaciones que no casan con el estilo del autor, pero donde ese mismo autor, nos deleita con algunos solos francamente buenos e interesantes.

Valoración personal : 7




domingo, 18 de mayo de 2014

Zoot Sims and The Gershwin Brothers


Tanto George como Ira Gershwin, han sido homenajeados e interpretados por multitud de intérpretes de muy diversos estilos, éste es un tributo ofrecido por tres de los grandes maestros del jazz:  Zoot Sims al saxo tenor, Oscar Peterson al piano y Joe Pass a la guitarra, respaldados por George Mraz al contrabajo y Grady Tate a la batería, donde toman 11 de las melodías más memorables de los hermanos Gershwin y las traducen al jazz clásico, dando como resultado un disco fresco, de tono cálido y familiar, donde Zoot había interpretado y tocado la mayoría de ellas miles de veces, pero en esta grabación todavía suena fresco, nuevo, como recién salido, enérgico e inspirado, confiado en sí mismo, consigue algunos de sus mejores registros y es uno de sus álbumes más logrados, suena a Zoot Sims. El piano de Peterson que a veces puede ser abrumador y desbordante, afortunadamente en este disco está en su lugar, contenido y explosivo cuando se le requiere, con solos excelentes, lo mismo que sucede con Joe Pass y su guitarra sonando a gloria, dando cuerpo, solidez y volumen están Mraz y Tate con una excelente sección rítmica.
El álbum se graba el 6 de junio de 1975 en NYC, en los estudios de la RCA para la Pablo Récords, convocados por el productor Norman Granz, 11 pistas y una duración de 49:11 minutos.
Puro jazz, con músicos en pura forma, dando la máxima expresión musical que pueden y lo logran, belleza pura creada por los hermanos Gershwin y libremente interpretada por este maravilloso quinteto liderado por Zoot Sims y su exuberante energía.

De 5 > 10, mi valoración es: 10

Vídeo con el famoso Summertime



lunes, 5 de mayo de 2014

Charles Tolliver and his All Stars: Paper Man


Charles Tolliver es uno de esos músicos que con frecuencia pasa inadvertido para la gran mayoría de amantes del jazz, también para las discográficas que no han relanzado su obra, cosa que parece inadmisible, ya que hablamos de un talento en la ejecución de la trompeta, se inició en los sesenta con Max Roach, fue en esta época cuando fue nº 1 como "trompetista promesa" por la revista Down Beat. El propio Tolliver hace un paréntesis en su carrera quizá demasiado largo y que dio pie a que su nombre no suene como se merece.
Tolliver en la década de los sesenta y setenta, era un músico tan brillante como Lee Morgan o Freddie Hubbard, discípulo de los Jazz Messengers de Art Blakey, lleva el jazz en las venas. Utiliza una técnica verdaderamente notable, de tono brillante y agresivo, excelente improvisador, consiguió que su música fuese un hard bop que sin abandonar los cánones establecidos, de forma vibrante y vanguardista, se asomaba siempre un poco más allá de la ortodoxia bopper de la época, su música sonaba a inconformismo y a permanente búsqueda.
Tres grabaciones realizó Tolliver para el sello Black Lion, Paper Man se grabó en julio de 1968, cuenta con un total de seis temas, todos compuestos por el trompetista de Jacksonville, tiene una duración cercana a los cuarenta minutos y se hace acompañar por Herbie Hancock al piano, Ron Carter al bajo, Joe Chambers en la batería y en los temas de la cara B, además interviene el saxo alto Gary Bartz. Con este acompañamiento y la calidad de las composiciones, el disco te invita a su continua escucha, destaco los temas Peace With Myself y el blues funky Paper Man. La grabación es buena,  el piano suena a la derecha, el bajo a la izquierda y batería y vientos al centro.
Con frecuencia el éxito viene por la sencillez, por lo simple, lo que constituye un desafío formidable para la improvisación e inventiva de los músicos, tornándose más difícil sostener un flujo de ideas sobre una estructura simple que sobre una compleja secuencia de acordes, en eso Tolliver era un maestro.

De 5 > 10, mi valoración es: 7

Un vídeo con el tema Earl´s World, primer corte del vinilo



domingo, 27 de abril de 2014

Bob Mintzer "In The Moment"

Caratula del álbum

Si éste disco se hubiera registrado en la década de los cincuenta, habría aparecido bajo el sello Blue Note, hoy en día las cosas funcionan de otra forma. Bob Mintzer con In The Moment consigue alejarse de esa aureola de músico de banda, así nos ofrece un disco más discreto, en forma de cuarteto donde él toca el saxo tenor y el clarinete bajo, además lo acompañan el pianista Phil Markowitz, el bajista Jay Anderson y el batería John Riley, el álbum se graba el 16 de diciembre de 2004, tiene una duración de 49:53 minutos y pertenece al sello Art Of Life Records.
El álbum incluye nueve temas tejidos bajo los patrones del post bop, ocho de ellos firmados por el propio Mintzer y uno por Markowitz. Donde realmente brilla Mintzer es en las baladas "Simple Song" o "Time after time", son un ejemplo de su forma de tocar, sencilla y directa, sin dobleces, como en la mejor tradición del jazz, además en What´s the Word saca de la caja su clarinete bajo para recordarnos que es uno de los grandes del jazz contemporáneo. Perfectamente arropado por el piano, donde Markowitz va y viene constantemente sin jamás interponerse en su camino, como adivinándolo, por su parte la sección rítmica forman un tándem con la habilidad suficiente para saber cuando presionar y cuando retroceder.
In The Moment no ofrece nada especial, no hay solos espectaculares, ni tan siquiera la interacción es especialmente emocionante, se trata, sencillamente de un disco de jazz sólido, sin artificios, casi académico, muy profesional y con un sonido envidiable.

De 5 > 10, mi valoración es: 8

Simple Song, una maravillosa balada del álbum


lunes, 21 de abril de 2014

Frank Morgan & Machito´s Rhythm Section


Una carrera truncada por las drogas, como tantos y tantos boppers de la época, justo al inicio, cuando algunos de los grandes músicos del momento querían contar con él, Morgan se habitúa al consumo de drogas, heroína, como hacía su idolatrado Charlie Parker, lo que le costó delinquir y treinta años de cárcel que truncaron una carrera y una vida, a su salida comentó: "En ese momento, yo y muchos otros músicos jóvenes cree que si queríamos tocar como Bird tendría que vivir como él" eso, además de la música hace referencia también al alcohol y las drogas duras. Morgan desde la cárcel de San Quintín, no pudo hacer carrera, pero no abandonó la música y se alió con Art Pepper, compañero de fatigas, con quien llegó a reunir grandes orquestas dentro del centro penitenciario. Trágica historia que trató de arreglar a su salida de la cárcel en 1985, donde tuvo la oportunidad de hacer carrera musical con éxito.
El disco Frank Morgan whit Conte Candoli & Machito´s Rhythm Section, se graba en 1955 para el sello Crescendo, en un intento de réplica de la costa oeste a lo que fue denominado Cubop, que no era otra cosa que Be Bop con aire latino que hacía furor en NYC, recordando el célebre disco de Parker con la Machito´s, así reunió a percusionistas de la Machito´s como José Mangual y Ubaldo Nieto a su proyecto. Era su debut como líder, estaba siendo promocionado como el "nuevo Bird", cuando debuta también como preso. El álbum cuenta con cuatro temas con la sección rítmica de Machito´s, el resto de temas lo conforma un septeto compuesto y liderado por Frank Morgan al saxo alto, Wardell Gray al saxo tenor, Wild Bill Davis al piano y al órgano, Conte Candoli en la trompeta, Howard Roberts en la guitarra, Carl Perkins al piano, Leroy Vinnegar al contrabajo y Lawrence Marable a la batería.
Todo el álbum es una gran lección de Be Bop, con protagonismo especial para Morgan y Candoli, que de alguna manera homenajean a sus ídolos Parker y Gillespie. El disco evidencia porque Frank Morgan estaba tan valorado en la época.

De 5 > 10, mi valoración es: 8

Vídeo con el tema Milt´s Tune (4º corte cara B del vinilo)



domingo, 20 de abril de 2014

Art Farmer & Jim Hall: Big Blues


Por separado Farmer y Hall tienen trayectorias consolidadas y en cierto modo paralelas, incluso parte del camino lo hacen juntos en los sesenta con una misma formación, aquí se vuelven a reunir para grabar para CTI, lo mejor que ambos dieron al mundo del jazz, ambos tuvieron estilos complementarios, en lo lírico, en lo armónico y un mismo tempo, con esa afinidad natural  Big Blues, nació con la mejor proyección posible.
El álbum se graba entre el 2 y el 3 de febrero de 1978, en los afamados estudios Electric Lady Studios (iniciativa de Jimmy Hendrix), cuenta con cuatro temas, siendo el tiempo de grabación de 34:37 h., los créditos son Art Farmer tocando el fliscorno, Jim Hall con la guitarra, Mike Mainieri con el vibráfono, Mike Moore al bajo y Steve Gadd en la batería.
El primer corte es de Benny Golson, Whisper Not crea un ambiente mágico entre los solos del fliscorno y la guitarra, entremedio el vibráfono y la sección rítmica genial al estilo de la pantera rosa de Henry Mancini, el segundo tema es de Thad Jones, A Child is born donde Hall se luce con su solo de guitarra y Farmer utiliza la sordina con gran fuerza expresiva, el contrapunto lo pone Mainieri; el tercer corte Big Blues lo compone el propio Hall y se percibe un jazz más fresco, más Bop, con reminiscencia a Davis, el bajo y la guitarra juegan sin parar durante toda la pieza, por otro lado, el fliscorno de Farmer adquiere textura de trompeta; el último corte es fascinante Pavane for a Dead Princess,  una obra de Maurice Ravel que fuerza al quinteto a convertirse en grupo de cámara con unos arreglos complejos y de mucha inventiva, Farmer interpreta la inquietante melodía con maestría abrazado por la guitarra y vibráfono, bajo y batería sincronizados con precisión Suiza. Destacar durante toda la grabación la sutileza de Steve Gadd  a la batería, es capaz de lograr una musicalidad con cierta melancolía, cosa que con este instrumento es difícil conseguir.
Farmer y Hall logran un magnifico maridaje en este disco, donde reconozco mi debilidad por Jim Hall, ya que interpreta algunos de los mejores solos de su carrera, por su belleza escarpada, con una forma de tocar directa, deliberada y memorable. El quinteto consigue impregnar el espacio musical de sensaciones maravillosamente alegres y conmovedoras.

De 5 > 10, mi valoración es: 9



lunes, 14 de abril de 2014

The Gary Burton Quintet with Eberhard Weber: Ring


En el año 14 del Siglo XXI, el vibráfono puede parecer una rareza musical de otros tiempos, durante el siglo pasado tuvo un papel importante en la formación de los grupos de jazz y algunos de sus intérpretes están hoy en el Olimpo del Jazz. Gary Burton (1943), comienza su andadura por los años sesenta, aún hoy, de vez en vez, nos sorprende con muy buenos trabajos, ejecutando el vibráfono con sutileza y elegancia.
Ring es un álbum que te conquista, porque es meditado, tranquilo y elegante, te llega al instante, porque teje tonos brillantes y luminosos, tonos color pastel, suaves, aterciopelados, a veces, con ritmos irregulares que crean un climax entre vibráfono,  bajo y guitarra que conmueven.
El álbum se graba entre el 23 y 24 de julio de 1974 en los Estudios Bauer de Ludwigsburg, para el sello ECM, que en esa década precisamente nos ofreció sus mejores discos, cuenta con un total de seis temas y una duración que se nos queda corta 37:10 minutos.
El quinteto lo componen Gary Burton con el vibráfono, Mick Goodrick en la guitarra, Pat Metheny en guitarra y guitarra de 12 cuerdas, Steve Swallow al bajo, Bob Moses en la batería y percusión y Eberhard Weber al bajo. Una colaboración clásica entre un gran compositor y artista como weber y un brillante intérprete como Burton, la guitarras de Metheny y Goodrick están sutiles, con punteos complejos y desafiantes que crean una atmósfera que gotea poco a poco en el ambiente musical creando un halo mágico alrededor de cada composición. Destaco el primer corte Mevlevia y el último The Colours Of Chloë, una auténtica maravilla para los sentidos.

De 5 > 10, mi valoración es: 8

The Colours Of Chloë, para mí el mejor tema del álbum, dejo una versión en vivo, porque no he encontrado la grabación de estudio.



lunes, 7 de abril de 2014

Erroll Garner: Concert By The Sea


Concert by the sea, es de esas grabaciones que hay que escuchar en vinilo y dejar el formato digital aparte, hay que oír esta grabación tal cual, sin mejoras, en este caso digitalizar la obra de Garner es como robar el espíritu, el alma del concierto del pianista de Pittsburgh. La grabación es de mala calidad, los detalles técnicos quedaron aparte, se grabó en una iglesia con un equipo barato y casi por accidente, no estaba prevista su grabación, sin embargo Garner esa noche, era su noche, estaba inspirado y eso dio como resultado una audición única e irrepetible: los sonidos guturales o gruñidos de Garner al piano y las reacciones del público, confieren un toque mágico a la grabación. Garner no solo nos dejó la inspiración de esa noche, además nos dejó el ambiente, la expectación y el goce del auditorio.
Durante el concierto Errol Garner, nos deja el mejor swing posible y con él una de sus mas vendidas y mejores obras, con temas originales y estándares, a los que da un toque único, creando durante toda la sesión una tensión acumulada y una liberación calculada de la misma, fruto de una espontaneidad, intensidad y creatividad desbocada.
El disco se graba en Carmel, el 19 de septiembre de 1955, para la Columbia Récords y cuenta con un total de 11 temas, entre los que no podía faltar un toque latino "Mambo Carmel by the sea", esa noche mágica el trío lo formaban además de Garner liderando al piano, Eddie Calhoun al contrabajo y Denzil Best a la batería.
Lo que nació accidentalmente, se ha convertido en uno de las mejores grabaciones de Erroll Garner, su disco más vendido y una evocación de toda una época, porque detrás de cada nota que sale del blanco y negro del teclado de Garner flota en el aire nombres tan importantes para el jazz, como Art Tatum o Earl Hines.

De 5 > 10, mi valoración es: 8

En el vídeo: April in París, corte nº 7 del álbum.



sábado, 1 de marzo de 2014

Joe Henderson: Mirror, Mirror


Joe Henderson con el saxo tenor, Chíck Corea al piano, Billy Higgins en la batería y Ron Carter al bajo, por separados todos líderes y maestros indiscutibles en sus instrumentos, reunidos en cuarteto, juntos no dan el resultado que se podría esperar, el feeling entre músicos no es el adecuado, o quizá el liderazgo de Henderson no fue suficiente... cosas que pasan, una de esas sesiones donde todos son muy buenos y el resultado no es tan bueno como se esperaba, ronda a toda la sesión un penetrante sentido de "igualdad", de que todo está bajo control, echando en falta más juego y más pasión. El resultado es un disco raro, difícil de digerir, extraño, casi sin alma, está claro que los cuatro no tuvieron su mejor día.
"Mirror, Mirror" se graba en Los Angeles en enero de 1980, para el sello Polygram, cuenta con un total de seis temas, con una duración total de 43: 23 h. con los que Chíck Corea contribuye con dos temas y Ron Carter con otros dos y Henderson aporta el bolero de Joe, junto con Keystone, lo mejor del álbum, El bolero de Joe da un toque algo latino a esta parte de la audición y donde quizá Henderson más se luce con su saxo tenor y Higgins suena como una máquina popper de palomitas, genial aquí el batería. No hay que perder la referencia de la fecha de la grabación, lo digo porque a principios de los ochenta Corea suena a Corea, controlándose excesivamente y Ron Carter hace bien su trabajo.
Mirror,Mirror es un buen disco desprovisto de alma, no brilla lo suficiente, le falta fuerza y pasión, aún así es una referencia en la carrera de altibajos de Henderson.

De 5 > 10, mi valoración es: 7

Dejo un vídeo con el Bolero de Joe, atención al juego de "palomitas" del batería. Genial.





domingo, 23 de febrero de 2014

Phil Woods, Tommy Flanagan & Red Mitchell: Three For All


Formato de trío, sin batería, saxo alto, piano y contrabajo. Tres músicos expertos que se reúnen y en unas sesiones graban Three For All, un disco sencillo, intimista, elegante que desborda maestría por sus surcos. Están cómodos, es un diálogo instrumental tan natural y relajado, un vaivén continuo a tres bandas que te transmiten belleza y más belleza, es como oír hablar a tres sabios que te transmiten todo su conocimiento generosamente y tú recibes desde la primera nota. Phil Woods está en un inmejorable momento y se permite ciertas libertades y coqueteos con sus compañeros de trío, donde Flanagan aporta fluidez a todo el álbum y Mitchell con su potente bajo da cuerpo al conjunto.
El álbum se graba para el sello Enja Horts Weber, la grabación se realiza en 1981, cuenta con un total de seis temas, dos de Woods, tres de Mitchell y uno de Flanagan, la duración total es de 39:59 h. un poco corta la sesión, te quedas con ganas de más, aunque aquí hacemos patente lo de "bueno y breve, dos veces bueno".
Destacar el homenaje que Phil Woods, realiza a Bill Evans, en el corte Goodbye Mr. Evans, quién murió meses antes de estas sesiones, para él, el saxo alto compone una preciosa y conmovedora balada como homenaje póstumo, donde el piano solo le hace una entrada a medida y a continuación hace entrada su saxo para señalar al mundo su admiración por Evans. Un disco bello y elegante muy bien ejecutado y donde Woods aún consigue arañar unos increíbles registros a su saxo alto.

De 5 > 10, mi valoración es: 8



domingo, 9 de febrero de 2014

Bill Evans & Jim Hall: Undercurrent

Caratula original del LP

La mano izquierda de Evans suena en el lado izquierdo del escenario, la derecha en el lado derecho  y la guitarra de Hall, suena en el centro, ligeramente detrás del centro del teclado. ¡qué espectáculo!, ¡qué genialidad!, todo un lujo para los sentidos. Primera colaboración en dueto entre Evans y Hall, hay otra cuatro años despues intermodulation.
Undercurrent se graba entre el 24 de Abril y el 14 de Mayo de 1962, se lanza al mercado en 1963 para el sello United Artists, en 1968 se reedita por Solid State y posteriormente pasa a la Blue Note. La duración total es de 53: 06 minutos, teniendo la edición original seis temas, en la versión remasterizada de la Blue Note de 2002, se añaden dos temas más y dos versiones alternativas.
Escuchar el disco es como escuchar a través de una rendija, una conversación privada y profunda entre dos genios creativos y ver la posibilidad de cada uno de ahondar en el otro a través de los espacios emocionales, más íntimos, sondear el espacio creativo del otro, hasta el punto de dejarse atrapar por la misma musa y producir uno de los discos más bellos y conmovedores que ha dado el mundo del jazz. El toque elegante, íntimo, culto del piano de  Evans, en perfecta armonía con la clase y sutileza de Hall, en un viaje que nos transporta hasta lo más profundo de las almas de ambos músicos.
Se percibe la madurez de Evans, quien en esta grabación se encuentra en lo mejor de su carrera, mientras el guitarrista comenzaba el transito hacia el maestro que fue años más tarde, desde esta perspectiva son más sesiones de Evans por el liderazgo que ejerce en todo el disco. Necesario para cualquier amante del jazz.

De 5 > 10, mi valoración es: 10 



lunes, 20 de enero de 2014

Benny Carter: Jazz a la Carter


Qué maravilla poder surfear por todos los estilos y tendencias que el jazz nos ha dejado a lo largo de las décadas, ir del swing al bop, del trío a la big band, del saxo a la guitarra, de Holiday a Metheny, de mi post anterior sobre Hiromi Uheara a este post sobre Benny Carter, cuantas décadas de diferencia y sin embargo un hilo conductor vertebra la música de los de entonces y los de ahora, esa maravilla se llama Jazz.
Benny Carter era uno de los más grandes saxos alto de la era del swing, junto a Johnny Hodges. Fue compositor, arreglista, trompetista, clarinetista, director de big band. Hábil, talentoso, excepcionalmente versátil, estuvo activo durante setenta y cinco años, enseñó a su saxo a cantar como los ángeles, con un sonido suave, fluido y elegante. Sax a la Carter es sólo una pequeña muestra de su actividad musical de los años 50 y 60, en él Carter aborda una colección de temas bastantes conocidos, estándares, dirigida a un público amplio, más allá del aficionado al jazz, Carter estuvo muy hábil al saber equilibrar y contentar con sus solos a la plebe y al aficionado más exigente.
El álbum se graba originalmente para el sello United Artists en una sola sesión, el 5 de febrero de  1960, con posterioridad pasa a la Blue Note quien edita en 2004 una versión digital donde incluye tres nuevos cortes que no estaban en el original: Ennui donde podemos disfrutar de Carter tocando el saxo soprano, qué pena que no nos dejara ningún álbum completo con este instrumento, también dos tomas del tema Friendly Islands, el resto de cortes son todos estándares de muy corta duración 3 ö 4 minutos máximo, hasta un total de quince temas. Pudiera parecer a primera vista que Carter o la discográfica, en realidad querían un mix de temas conocidos para su comercialización, bien al contrario, se trata de un trabajo bien elaborado, íntimo y muy bien trabajado por el cuarteto.
A Carter lo acompañaban el gran Jimmy Rowles al piano, Leroy Vinnegar al bajo y Mel Lewis a la batería, un trío de primer nivel para "El Rey", donde destacan los constantes diálogos entre Carter y Rowles y es que el piano por momentos está exuberante, tanto en el acompañamiento como en los solos, junto con Vinnegar que con su bajo logra dinamismo y hace que la música fluya libremente, Lewis está sobresaliente con las baquetas, el líder encuentra el apoyo buscado.
Sax a la Carter es un disco donde podemos encontrar la pureza de tono de Benny Carter, esa manera suya de tocar que hace que  pareciera tan fácil como respirar, es un álbum donde se puede apreciar la dedicación, la improvisación melódica y el talento para los solos bien estructurados.

De 5 > 10, mi valoración es: 8



miércoles, 8 de enero de 2014

Hiromi Uehara: Voice

Portada del CD
Un revulsivo para los sentidos, una sacudida auditiva que te despereza del letargo, una corriente eléctrica que te sacude el espinazo, una tormenta musical perfecta con una gran técnica, un gran talento, mucha energía y un gran corazón, porque su música, como las emociones salen del corazón. Uehara nos ofrece ideas musicales frescas, un fraseo excepcional, mezcla estilos con toda la naturalidad, pasando casi de puntillas por el be bop, el jazz fusión, el rock progresivo, la música clásica... en un talento técnico y una creatividad sin parangón. Es capaz de interpretar piezas muy complejas sin esfuerzos, parece estar en otro nível, te impresiona su musicalidad, su energia, su composición, sus dotes y buen criterio.
Llama a su álbum Voice y lo hace desde la música instrumental y las emociones "La música habla por sí mismo" Hiromi trata de expresar sin vocalización, las emociones de La Voz. El disco se graba para el sello Telarc Digital entre el 9 y el 11 de noviembre de 2010, aunque no sale al mercado hasta el 7 de junio de 2011, cuenta con un total de ocho temas, siendo el primero de ellos homónimo del álbum y el último una interpretación libre de La Patética de Beethoven, sonata para piano nº 8, la duración total es de 65:55 minutos.
El disco cuenta con una nueva forma musical llamada Trio Project, que en el fondo viene a ser el clásico formato de trío de piano, en el bajo encontramos a Anthony Jackson, en la batería encontramos a Simon Philips, ambos afamados y provenientes del pop-rock, una combinación muy adecuada para el estilo de Hiromi. Imaginar un trio contemporáneo más potente, va a ser todo un reto. El piano aporta la finura, la forma de expresión y un brillante manejo, Jackson aporta jazz fusión a través de su bajo y Phillips aporta la intensidad y fuerza de su batería. Jazz del Siglo XXI, jazz del que viene, jazz del bueno.

De 5 > 10, mi valoración es: 8