Formato de trío, sin batería, saxo alto, piano y contrabajo. Tres músicos expertos que se reúnen y en unas sesiones graban Three For All, un disco sencillo, intimista, elegante que desborda maestría por sus surcos. Están cómodos, es un diálogo instrumental tan natural y relajado, un vaivén continuo a tres bandas que te transmiten belleza y más belleza, es como oír hablar a tres sabios que te transmiten todo su conocimiento generosamente y tú recibes desde la primera nota. Phil Woods está en un inmejorable momento y se permite ciertas libertades y coqueteos con sus compañeros de trío, donde Flanagan aporta fluidez a todo el álbum y Mitchell con su potente bajo da cuerpo al conjunto.
El álbum se graba para el sello Enja Horts Weber, la grabación se realiza en 1981, cuenta con un total de seis temas, dos de Woods, tres de Mitchell y uno de Flanagan, la duración total es de 39:59 h. un poco corta la sesión, te quedas con ganas de más, aunque aquí hacemos patente lo de "bueno y breve, dos veces bueno".
Destacar el homenaje que Phil Woods, realiza a Bill Evans, en el corte Goodbye Mr. Evans, quién murió meses antes de estas sesiones, para él, el saxo alto compone una preciosa y conmovedora balada como homenaje póstumo, donde el piano solo le hace una entrada a medida y a continuación hace entrada su saxo para señalar al mundo su admiración por Evans. Un disco bello y elegante muy bien ejecutado y donde Woods aún consigue arañar unos increíbles registros a su saxo alto.
De 5 > 10, mi valoración es: 8